Reunidas los amigas entorno la mesa, abrimos el corazon, tanto como dias vividos juntas . Y repartimos el amor sobre los huecos que mostramos vacios, de manera que volvemos a recontruir el alma a base de parches maravillosos de amistad. Miradas que se comprenden, personas que se conocen, mujeres que admiran, niñas que recuerdan lo que soñaban...Una piña en torno a una vida construida a base de momentos vividos con las manos entelazadas. Abrazos, risas, lágrimas, confesiones, disculpas, perdones, todo está en esa fruta. Es regalar familia.